Chilitali

OMG, no puedo creer que todavía no hayamos puesto una entrada sobre el Chilitali! Esto debería ser pecado mortal.
Cómo describir el mítico Chilitali?... Bueno, primero diré que llegamos por recomendación de una amiga, y si ella no nos hubiera dicho donde estaba exactamente, no hubieramos dado con el lugar porque es basicamente una picada, con look de boliche de barrio, súper quitado de bulla y piolita. Al principio pensamos que estaba cerrado, de hecho lo estaba, pero nos salió a atender el dueño del local, que era tambén quien cocinaba y nos dijo que pasaramos, que él nos podía preparar alguna cosa. Así fue cómo entramos y nos sentamos en una de las mesas en el local vacío, donde sólo estábamos nosotros tres, incluyendo al dueño. Al momento de sentarnos pedimos una cerveza de litro y nos entregan el control remoto de la tele. Era básicamente estar en el living de tu casa esperando que te prepararan algo rico. Pedimos una lasagna mixta (mitad boloñesa, mitad vegetariana) y una escalopa kaiser con papas fritas. La verdad esto fue hace mucho tiempo, así que de precios no me acuerdo mucho, lo que sí sé es que no era caro para el tamaño de las porciones (eran gigantes), pero la comida estaba taaaaaaaaaaaaaaaan rica, que salimos rodando de ahi, incluso con comida restante para el almuerzo del día después (y nos arrepentimos de no haber dejado más para más tarde, porque repito, estaba taaaan rico!).
Este local es un must y totalmente recomendable, tiene comida chilena e italiana como pastas y pizzas (creo), pero es increíble.
No tengo más que decir que, ¡vayan! (Si es que todavía existe...)
Ñuble 367, esquina Madrid. Comuna de Santiago.

Sobre cosas mágicas y maravillosas

Siempre he considerado que hay algunos lugares que guardan cierta magia, el living del te solía ser uno de esos lugares.

Llegue a conocer el Living del Té por la clásica recomendación del "amigo de un amigo". Este "amigo" no hizo mas que hablar maravillas del local, que por un lado contaban con un té de hojas de variedades mágicas y maravillosas, que por otro lado las tortas eran algo de otro planeta, y así sucesivamente. Para mi primera visita al local ya contaba con expectativas absurdamente altas. 

Paso algún tiempo entre la avalancha de elogios y el momento en el que visite el local. Creo que lo mantuve guardado como una carta bajo la manga, una carta que de seguro consideraba ganadora. En mi primera visita al Living del Té fue durante una cita., por recomendación de mi "amigo", comenzamos con una tetera para compartir, esta tetera para compartir, son unos 500 ml de te de hojas, con 16 variedades de té dispuestas en pequeños frascos que te permiten ver y oler la mezcla que desees probar. Todas estas variedades eran cada una mas extraña y maravillosa que la siguiente. Debo confesar que quede maravillado con la variedad de sabores con los que contaban, siendo el fanático del te que soy, ese local era un paraíso. Y bueno, luego del té, la elección natural fue continuar con algo de dulzura maravillosamente encapsulada en un trozo de torta. En este punto esta de mas decir que al igual que mi "amigo", me convertí en un groupi mas el living del té.

Desde esa mágica primera visita he vuelto muchas veces a maravillarme de cosas que no vi la primera vez, por ejemplo, no fue hasta mi tercera visita que descubrí que también servían unos sándwiches de proporciones épicas que difícilmente podrían ser consumido por una sola persona. Unos sándwiches no solamente gigantes, sino que también exquisitos con extrañas y deliciosas mezclas.

Ya hace mas de un año que regularmente visito este local y las cosas lentamente han ido cambiando. El local por recomendaciones de boca a boca se comenzó llenar cada vez mas, la atención dejo de ser tan personalizada y las variedades mágicas y maravillosas de té de hojas fueron reemplazadas por mezclas comunes y  las porciones comenzaron a variar para acomodarse mejor a la ley de la oferta y demanda. Lentamente la magia comenzó a extinguirse.  

Hace unas semanas volví al Living del Té. Las cosas habían cambiado, pero a pesar de todo me senté a disfrutar de una taza de té con la misma compañía que tuve esa mágica y maravillosa primera vez, me senté y disfrute de un té de hojas que puede no ser tan maravilloso como lo fue antes, pero que la melancolía del recuerdo y la compañía transformaron en algo ciertamente mágico.


Sept 2013: Actualización.
Lamentablemente el living del té ahora sólo vivirá en nuestras memorias ya que lo demolieron y van a poner un Hogs en su lugar. Me da mucha pena porque no sólo era un local querido, también vivien ahi muchos recuerdos y ocasiones especiales.

Buscando la mejor pizza de santiago

por: @Migrodriz

He buscado, créanme que lo he intentado. He viajado en peregrinación a recondidos lugares de Vitacura, en los cuales debes masticar hoja de coca para no "apunarte"... y nada. Declaro que por el momento dejo de intentarlo, me rindo. Debo clavarme este mensaje en lo mas profundo de mi inconsciente "No hay una mejor pizza que la que preparan en el local de manuel montt".

Esta "historia" comienza con un ataque de hambre e

n el sector de Irarrazabal y la búsqueda de algún lugar donde comer, la consigna era un lugar que contara con el estándar de las 3 b (bueno, bonito y barato). Fue así como surge la idea de ir a un pequeño local de pizzas en Manuel Mont. Algo sencillo, simplemente para matar el hambre.

El local no tenia nada de especial, un local pequeño con ambiente "hogareño" y con un sabor a completos de 2 por $1.500, (no se si se entiende el concepto). Ese tipo de local acogedor, en donde se reúnen familias por años a comer. Ese ambiente que yo también creía que no existía mas en el negocio de los restaurantes. Luego de mirar los precios en la "carta" (que por lo demás estaba mas que bien), ordenamos una pizza simple, algo genérico. Pero esa primera mordida cambiaría y arruinaría el sabor de cualquier otra pizza desde ese momento en adelante.

He intentado buscar alguna otra pizzeria que se le iguale, he ido a cuanto lugar me han recomendado, pero hasta este momento no he podido encontrar mejor pizza que esa.

Desde ese día que entre por primera vez al "local de Manuel Montt" a pasado cerca de un año, pero no ha pasado mes en el que no haya regresado a ese ambiente hogareño y sencillo donde sin lugar a dudas preparan las mejores pizzas de santiago.

PD: Este es el punto donde debería dar un precio aproximado, seguido por los datos del local. Pero esta vez, solo esta vez prefiero reservarme de entregar cualquier dato sobre el local. Prefiero mantenerlo tal y como esta. Prefiero mantenerlo como "mi local de pizzas".

Too Much Sushi

El sábado en la noche fuimos a probar los "palitos libres" del Too Much Japanese Sushi que queda en bellas artes. Los palitos libres son basicamente todo lo que puedas comer de sushi hasta que te aburras, a lo que yo dije "Challenge Accepted!", siendo una loca fanática del sushi, cual niña quinceañera grita por Justin Bieber, esa soy yo, pero por los exquisitos rolls japoneses. Esta modalidad de tenedor libre sale $6.490 por persona y no incluye bebestibles ni nada extra, sólo rondas infinitas de rolls. Aparte de pedir esto ordenamos un par de tragos, algo tradicional y algo exótico, para probar. Nuestra orden fue un Tequila Sunrise y un Wasabi Sour.

En cuanto a los tragos... mmmm la verdad no me gustaron mucho. El Wasabi Sour ($1.800) era un overrated Pisco Sour, pero verde, muuuuuuy ácido, casi intomable por mi que soy un poco alérgica al limón, sólo en pequeños sorbos.
El Tequila Sunrise ($3.100) para empezar era demasiado caro para el tamaño y sabor del trago. Hubo todo un drama con el jugo de naranja, que primero me dijeron que no tenían por lo que no podían servirme ese trago, a lo cual después corrigieron y dijeron que sí tenían para que al final resultara que o se les olvidó o realmente no tenían jugo de naranja. Lo peor de todo esto es que quisieron compensar la falta de jugo con más granadina, resultando en un trago demasiado dulce para poner en palabras, sin el ácido de la naranja y cabezón. Totalmente no recomendado este trago.

Ok, volviendo a los rolls. Servían 5 variedades distintas de rolls en cada porción de 6 piezas cada porción. Me sorprendió gratamente el darme cuenta que también incluían rolls calientes en los platos, pero después me di cuenta que tal vez esta era una estrategia para poder hacer rendir los rolls que estaban muy fríos. Me tocaron algunos que se notaba que habían salido recién del refrigerador porque estaban duros, helados y mojados. Not good, pero el hacerlos tempura era una buena solución.

En total, hubieron varias cosas que me gustaron y muchas que no, como el que había que constantemente pedir más wasabi, que tampoco era muy bueno y siempre nos daban un poquitito (y yo devoro wasabi como si fuera palta). La atención fue buena, se equivocaron en el vuelto de la cuenta (2 veces), por lo que si hubiera pedido otra ronda de tragos, no me hubiera percatado. Pero supieron resolver la situación.
Los tragos, malos, los rolls... mmmm no muy buenos, pero igual volvería sólo para poder comer cantidades industriales de sushi hasta no poder más e irme rodando de vuelta a la casa con una inmensa sonrisa en la cara.